VIVE LA MÚSICA EN NUEVA YORK

Click aquí para escuchar mientras lees: http://www.youtube.com/watch?v=k507RsW9gFw


Nadie que esté en este mundo ignora que de Nueva York salieron y a Nueva York vuelven los mejores músicos de la historia de este arte. Y eso es algo que se nota. No me digan en qué, pero se nota.

No sé si será por los vientos huracanados que azotan el invierno de Manhattan en lo cardinal y en lo ordinal, o si será la sensación de vértigo de mirar arriba, más arriba, buscando el final de cualquier rascacielos al azar. No sé si serán las horas pasadas en horizontal en Central Park, o las transcurridas en vertical subiendo y bajando por escaleras de madera imposiblemente mecánicas. Todo es inspirador en Nueva York. Si necesita una idea y no le viene, no la encuentra, no da en el quid... vuele a Nueva York. Apuesto a que la ciudad le brindará ese último click en su cabeza y le regalará con la sonrisa del que sabe que acaba de ver la luz.

Los mejores pianos, violines, saxofones, clarinetes, trompetas, guitarras, contrabajos, escobillas, voces e imaginaciones se dejan oir en Nueva York. Si aún no fue a la City, encontrará en cualquier guía muy buenos consejos orientados al disfrute de la música. Tanto el experto como el menos aficionado pasará grandes momentos en clubes como el Blue Note, mítico, y otros cuantos, como el Smoke, o el Village Vanguard, el Lincoln (en su Jazz Center o para escuchar a la Phillharmonic), el 55 Bar, o el Carnegie Hall, disfrutando de música en directo de la mano de los mejores del mundo. ¡Un lujo! Ahora bien, prepare el bolsillo porque, en la mayoría de los casos, hay que pagar una entrada que está plenamente justificada pero hay que tener presupuestada.

He aquí una sugerencia: por un par de dólares o la voluntad, dé un paseo por el Greenwich Village al caer el día, callejée entre la Sexta y Broadway, recorra la calle Bleecker, suba por Thomson o por Sullivan. Déjese llevar por el solo de algún saxo o clarinete que desde alguna esquina le llame por su nombre y deléitese con el talento de la calle. ¡Es tan fácil descubrir el dorado del instrumento casi suspendido en la oscuridad mientras un tipo que se confunde con la noche le saca lo mejor que lleva dentro! Ahora es cuando vienen esos dólares. No me diga que no ha merecido la pena. Esa será su experiencia personal, irrepetible y única. Siempre quedará en su retina el momento en que se sacó los dos dólares del bolsillo, se acercó temiendo interrumpir y sus ojos se cruzaron con los del talentoso músico que tocaba para usted, siempre recordará esas palabras que no entendió y quedará en su memoria su inmediato pensamiento: "¡cómo me gusta esta ciudad!".

www.bluenote.net
www.smokejazz.com
www.villagevanguard.net
www.55bar.com
www.carnegiehall.org
www.jalc.org
http://nyphil.org